¡Marxistas, Proletarios y Pueblos de México Uníos! Declaración Política del V Encuentro Internacional del Pensamiento Crítico: “Volver a Marx”

¡Marxistas, Proletarios y Pueblos de México Uníos!
Declaración Política del V Encuentro
Internacional del Pensamiento Crítico:
“Volver a Marx”

2 y 3 de mayo de 2015, Ciudad de México, D.F.

Rindiendo honores y homenaje a nuestros camaradas recién caídos en la lucha, más de 250 compañeros y compañeras, procedentes de 18 estados del país y del Distrito Federal, en representación de organizaciones políticas y sociales y a título personal; contando también con las destacadas intervenciones del filósofo latinoamericano Enrique Dussel; del especialista en la vida y la obra de Rosa Luxemburgo, Peter Hudis; del especialista en temas de Marx y los derechos humanos, José Carlos García; y, en cuanto a la experiencia en la unidad de los marxistas en América Latina, por Cuba, el Dr. Eulogio Rodríguez, y el ex Embajador del Estado Plurinacional de Bolivia en México Jorge Mansilla Torres.

En la sede central del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, reunidos para reflexionar y tomar acuerdos en torno a las “posibilidades y perspectivas de la unidad de los marxistas mexicanos”, así como sobre el qué hacer ante la desastrosa y amenazante situación nacional e internacional que padecemos como nación y como humanidad, rindiendo así un modesto homenaje a Carlos Marx en el aniversario 197 de su nacimiento, damos a conocer las definiciones y compromisos asumidos:

1.- Que asumimos el marxismo como la compleja teoría para que la lucha por liberar a la humanidad y al planeta de la barbarie y devastación, en que lo hunde el sistema capitalista mediante su modelo neoliberal, de paso a un sistema cuyo fin sea la felicidad de mujeres y hombres libres de la explotación y el dominio burgués, así como la conservación de la Madre Tierra, hoy sometida a un intenso proceso de ecocidio para acrecentar las ganancias del gran capital.

2.- Que para el marxismo, ese sistema superior que sustituirá al capitalismo es el socialismo-comunismo, en el cual la propiedad privada de los medios de producción se socializarán y se construirá un nuevo Estado, hoy capitalista y autoritario, en otro constituido desde la democracia comunitaria directa y la participativa como dominantes, en el que la representativa esté subordinada para que se gobierne obedeciendo a la ciudadanía, a los trabajadores y a los pueblos, o en su caso sean destituidos los gobernantes que se burocraticen o corrompan.

3.- Que para el marxismo, la liberación de la humanidad y de la Madre Tierra de la explotación, de la depredación y destrucción que ahora lleva a cabo todo el sistema capitalista-imperialista, solo será posible a través de la lucha consciente y organizada mediante la revolución socialista, de las clases explotadas y oprimidas encabezadas por el proletariado, contando hoy con nuevos sujetos históricos aliados dada la esencia destructiva del capital que amenaza con destruir todo signo de vida sobre el planeta.

4.- Que esta esencia mundial de la lucha por el socialismo y el comunismo, implica desplegar y acumular fuerzas en cada realidad nacional a fin de tener avances cualitativos, que desempeñen el papel de apoyos estratégicos dialécticos al proceso socialista internacional.
5.- Que como demandara el comandante Che Guevara México es nuestro Vietnam… y liberarlo de los bancos, de los monopolios y demás empresas trasnacionales, así como de las camarillas político empresariales gobernantes, es nuestro objetivo estratégico principal, para reconstruirlo sustentablemente con justicia social y democracia desde la ciudadanía, los proletarios y los pueblos, buscando relaciones justas y dignas con el pueblo de Estados Unidos, así como incorporarnos al proceso de descolonización y emancipación que en América Latina, el Caribe y varias partes del mundo ya se viene forjando, además de fortalecer la lucha por la paz en el mundo y contra las nuevas guerras coloniales y de saqueo que multiplican los Estados imperialistas en busca de aliviar la bancarrota neoliberal en curso. Impedir, por todos los medios a nuestro alcance, la consolidación del fascismo, el riesgo de una guerra mundial y, el que la oligarquía imperialista nos imponga los criminales efectos de sus crisis capitalistas.

6.- Este reto estratégico de liberar a México, nos plantea la tarea, también estratégica, de conformar una amplia mayoría popular de decenas de millones de connacionales, que organizados participativamente, devengamos en un poder superior al bloque vendepatria y corrupto hegemonizado por el gobierno estadounidense y el capital trasnacional, los que en las últimas tres décadas han integrado de facto a nuestra patria a su zona inmediata de dominación y seguridad.
7.- En poco más de tres décadas de políticas neoliberales privatizantes y entreguistas, encabezadas por las cúpulas priistas y panistas, México pasó de ser un país dependiente, con un Estado capitalista benefactor que le permitía márgenes de soberanía y cierto desarrollo nacional y social, a un país recolonizado, integrado a la potencia del norte que lo ha sometido económica, financiera, política y tecnológicamente, así como en política-mediática y policiaco-militar, imponiéndole una explotación inhumana y degradante de la mayoría trabajadora, tanto como el despojo y depredación irracional de nuestros recursos naturales y su planta productiva, lo cual nos desangra y pone en riesgo nuestra existencia de escasos 200 años como Estado-nación.

8.- Dos momentos estelares de este proceso de neocolonización fueron la firma del TLCAN y de la Iniciativa Mérida.

Con el TLCAN se formalizó la entrega de las políticas económicas a las decisiones de E.U. vía Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional. Contrarreformas estructurales y recortes de gasto público dan cuenta de la fase más avanzada y agresiva de la recolonización que le corresponde administrar al gobierno de Peña Nieto.

Con la Iniciativa Mérida se entregó el mando estratégico de los cuerpos armados nacionales a las agencias militares y policiacas estadounidenses. La guerra que ha bañado de sangre y llenado de fosas el territorio nacional desde ese 2006, es la principal expresión de esa condición neocolonial. Las masacres de Tlatlaya, Apatzingán y la tragedia de Iguala-Ayotzinapa, dan cuenta de la escalada superior del terrorismo de Estado y violencia en lo que va del actual desgobierno priista.

La reciente legalización para que cuerpos policiacos y de Estados Unidos actúen armados en territorio nacional, muestra que tanto, el Estado Mexicano ha devenido en vil protectorado de Estados Unidos.

9.- Este avanzado proceso de recolonización de México y de transformación del Estado que emergió de la Revolución Mexicana en un instrumento de ocupación del país y de guerra contra el pueblo, significa el obstáculo principal a vencer para cambiar la historia en favor de la nación, de la clase trabajadora y de los pueblos de México.

Esta es la situación actual de nuestro Vietnam. De ella hay que partir para reemprender la tarea estratégica de conformar ese gran movimiento de decenas de millones de mexicanas y mexicanos, que a través de un proceso de lucha que amalgame: democracia-liberación nacional- y revolución socialista, rescate nuestra patria hoy mancillada por la dominación del gran capital y de gobiernos entreguistas a su servicio.

Y decimos reemprender, porque en estos 33 años de agresión capitalista salvaje y gobiernos del PRI, del PAN y del “Pacto por México”, nuestro pueblo ha desplegado infinidad de luchas de resistencia, conformando tres vertientes que han configurado verdaderas insurgencias de alcance nacional.
10.- A escasos seis años de que se desencadenara la ofensiva neoliberal, apuntalada por el inicio de la hegemonía tecnócrata sobre el régimen priista con el gobierno de Miguel de la Madrid, en 1987-88 el pueblo mexicano pasó de la resistencia a la conformación de un Movimiento Democrático-Nacional (MDN) con vocación y capacidad para disputar el gobierno y la nación a través de la lucha político electoral. El pueblo y la izquierda de México fueron pioneros en América Latina, en conformar un movimiento ciudadano-popular que derrotó en las urnas al régimen que había gobernado durante décadas y se consideraba invencible.

La irrupción de esta insurgencia ciudadano- popular en el proceso electoral de 1988, abrió un período de crisis política, entendida como disputa de la hegemonía entre el bloque de fuerzas impulsoras del rumbo neoliberal y el bloque de fuerzas patrióticas y de izquierda, que portando un proyecto democrático-nacional, buscaba preservar y profundizar conquistas nacionales y sociales acumuladas desde la Revolución Mexicana de 1910-17, perfilando la posibilidad de radicalizar la transición democrática iniciada con la reforma política y la amnistía de 1978; conquistas que el ascenso de las luchas democrático-populares y el movimiento armado socialista a partir de 1965-68, habían obligado al régimen priista a abrir, en un esfuerzo por contender el desgaste que ya perfilaba su crisis.
11.- Cuando iniciaba el último año del gobierno de Salinas, estando a punto de entrar en vigencia el TLCAN, que aparecía como el cerrojo de las privatizaciones y la apertura comercial con las que “México estaba accediendo al primer mundo”, el 1 de enero de 1994 irrumpió en Chiapas la rebelión armada indígena-zapatista, que concitó la confluencia de fuerzas y militantes de izquierda y de movimientos que se habían mantenido al margen del PRD y el MDN, atrayendo también a los sectores más militantes de éstos, conformando otra insurgencia de naturaleza más político-social, que prefiguró la posibilidad de dar forma a un actor nacional de perfil más popular y de pueblos que la insurgencia político electoral del 88. Hoy, el zapatismo con sus iniciativas diversas, pero sobretodo con su práctica cotidiana, es sin duda alguna, una importante fuerza motriz de la revolución anticapitalista en México y en el mundo.

12.- Por sobre el movimiento electoral ciudadano popular y la insurgencia zapatista y de los pueblos originarios, la ofensiva neoliberal del gran capital contra los intereses y derechos populares y nacionales continuó profundizándose, generando la multiplicación de luchas de resistencia que hicieron necesarias y viables iniciativas de articulación. Buscando responder a esta necesidad, colectivos civiles y fuerzas de izquierda principalmente extrainstitucionales, junto a destacamentos sociales de lucha como la CNTE y el SME, conformaron en los últimos años del siglo XX, la Promotora Nacional contra el Neoliberalismo, desde la cual se empujó la constitución de frentes de movimientos para potenciar su capacidad de lucha y convocatoria movilizadora.

Desde el Frente Nacional de Resistencia contra la Privatización de la Industria Eléctrica que logró parar la iniciativa entreguista al final del gobierno de Zedillo, pasando por el Frente Sindical, Campesino, Indígena, Social y Popular, se han conformado no menos de 5 articulaciones frentistas de movimientos sociales, que aunque han tenido limitaciones para preservarse surgen y resurgen en función de agresiones o acontecimientos políticos relevantes, mostrando que representan una tercera vertiente de resistencia y cuestionamiento a la dominación del proyecto neoliberal.

Actualmente existen varias articulaciones frentistas de alcance nacional, como el Frente Amplio Social Unitario en torno a STRM-UNT, la Nueva Central y la Asamblea Nacional de las Resistencias en torno al SME, la Constituyente Ciudadana en torno a sectores de la Iglesia Progresista. Todas ellas han confluido en las Jornadas Globales de Lucha y la Asamblea y Convenciones Nacional-Populares desplegadas a partir de la tragedia de Iguala, con un peso determinante de la CNTE-Normalistas y Padres y Madres de los 43 jóvenes desaparecidos forzadamente.

Esta vertiente de lucha político-social adquiere diversa intensidad y formas frentistas en las entidades del país, y últimamente tiende a expresar con más fuerza un carácter binacional, como lo muestra la lucha de los trabajadores agrícolas de San Quintín, la exigencia de la presentación con vida de los 43 y la campaña por la liberación de Nestora.

13.- De estas características en la situación actual de nuestro país hay que partir en la construcción programática-estratégica y organizativa de las fuerzas de matriz marxista, para que en el menor plazo posible supere su fragmentación y devenga en un actor de implantación nacional, con capacidad para ser el motor de la conformación de un movimiento nacional antifascista, anticapitalista y antiimperialista, que haga imposible que los político-empresarios vendepatrias y las trasnacionales sigan gobernando y pasándonos a cuchillo como nación y como pueblo.
No ignoramos las diferencias de concepciones, métodos de trabajo y organizativos que portamos las fuerzas y militantes que conformamos el torrente marxista mexicano. Pero ante los retos que nos convocan, de dar una salida popular y patriótica al desastre económico-ecológico, así como al drama social y descomposición institucional que padece la nación, debemos ser muy autocríticos con nuestras visiones y trayectorias, y no menos receptivos a las aportaciones y construcciones de todas y todos los que asumimos la necesidad de trascender las tendencias sectarias, grupales o individuales, para recrearnos en una organización-movimiento superior, que nos permita desarrollar y posicionar con fuerza al marxismo crítico como referente en el debate nacional y la lucha política democrático-revolucionaria.

Reivindicamos el proceso unificador que han jugado los encuentros Volver a Marx, por lo que acordamos continuarlos, promoviendo el VI Encuentro Internacional del Pensamiento Crítico Volver a Marx el 5 de mayo de 2016, en ocasión del 198 aniversario del nacimiento de Carlos Marx, esperando que muchas otras fuerzas y militantes marxistas lo enriquezcan teórica y políticamente.
Con entusiasmo y convicción los marxistas, socialistas y comunistas reunidos en el V Encuentro del pensamiento crítico “Volver a Marx”, convocamos a los trabajadores y pueblos de México a integrarse a la lucha contra el capital y por el socialismo.

Porque: ¡¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!! Refrendamos nuestro compromiso con normalistas-CNTE y con los familiares de los jóvenes asesinados y de los 43 que padecen desaparición forzada, con los cientos de luchadores presos, así como con los 80 mil proletarios-combatientes-jornaleros agrícolas del Valle de San Quintín, B.C. Saludamos los trabajos que por estos días el EZLN ha convocado y le invitamos a discutir y buscar acuerdo para destruir-superar la hidra capitalista-imperialista.

Fraternalmente:

¡Proletarios de todos los países, uníos!
POR LA UNIDAD DE LOS MARXISTAS MEXICANOS
Y LA ACUMULACIÓN DE FUERZAS
V Encuentro del Pensamiento Crítico
“Volver a Marx”
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